Reformas previsional y tributaria. El gobierno de Javier Milei continúa apostando a la política de déficit cero como pilar fundamental de su gestión, manteniendo firme su postura frente a los reclamos de mandatarios provinciales que solicitan mayores recursos.
La propuesta central de la administración nacional sigue siendo reducir al máximo los gastos del Estado, lo que implica la continua reducción de personal en las reparticiones públicas. Según fuentes de la Casa Rosada, no se renovarán los contratos de los empleados cuyos acuerdos lleguen a su fin y se continuará con el retiro del personal en edad jubilatoria. Además, se eliminarán áreas y dependencias del Estado cuyas funciones ya no se consideren esenciales.
“El propósito es eliminar todo gasto superfluo que genera el Estado”, expresó un alto colaborador de la Casa Rosada, quien resumió así la política fiscal del gobierno, que busca reducir el tamaño del Estado a través de un ajuste administrativo y de personal. La estrategia de "motosierra", como se la conoce en los círculos políticos, no implica solo una reducción de recursos, sino una reestructuración profunda de las funciones del Estado para que sean más eficientes y acordes a los nuevos objetivos de la administración.
Reforma impositiva: simplificación y racionalización del sistema
En paralelo, el gobierno de La Libertad Avanza se encuentra trabajando en un conjunto de reformas estructurales que incluyen una reconfiguración integral del sistema tributario del país. Según pudo saber el diario Ámbito Financiero, el equipo económico de Milei tiene como objetivo reducir a un número menor de impuestos, aspirando a una estructura más simplificada. “La intención es reducir a cinco o seis la cantidad de impuestos”, adelantaron fuentes oficiales. La reforma, que podría ser presentada por el presidente Milei en el discurso de apertura de sesiones ordinarias de 2025, busca optimizar el sistema impositivo sin generar una reducción inicial significativa de la carga tributaria.
Actualmente, Argentina cuenta con 155 tributos diferentes a nivel nacional, según un informe del Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF). Sin embargo, un alto porcentaje de la recaudación proviene de solo seis impuestos: IVA, Aportes y Contribuciones a la Seguridad Social, Ganancias, Ingresos Personales, Débitos y Créditos bancarios y Derechos de exportación.
La reforma tributaria que prepara el gobierno busca simplificar este panorama y reducir la cantidad de trámites administrativos y cargas fiscales para mejorar el clima de negocios y la competitividad del país. Además, la administración nacional considera que cada provincia debe ser libre de definir su propia política tributaria, aunque advierten que aquellas que aumenten impuestos podrían perder competitividad.
Reforma previsional
Otra de las reformas clave que prepara el gobierno de Milei es la previsional, que incluiría la eliminación de los regímenes especiales que hoy rigen para ciertos grupos de trabajadores. Según los cálculos oficiales, la eliminación de estos regímenes permitiría triplicar la jubilación mínima, actualmente de $259.600, que pasaría a $778.800. Esta medida afectaría a trabajadores como los de la construcción, docentes, investigadores, del Poder Judicial y del servicio exterior, quienes actualmente cuentan con beneficios previsionales diferenciados, que permiten jubilaciones con requisitos más laxos.
El sistema previsional argentino enfrenta graves desafíos, ya que la proporción de trabajadores activos en relación con los jubilados es baja. Según estimaciones, actualmente hay apenas 1,5 trabajadores en blanco por cada jubilado, cuando lo ideal sería que existieran 3 trabajadores por cada pasivo. En este sentido, la reforma previsional también estará acompañada de una reforma laboral, con el objetivo de fomentar la formalización del empleo. En la actualidad, el trabajo informal representa casi un 30% de la fuerza laboral, lo que contribuye a la insostenibilidad del sistema previsional.
La intención de las autoridades nacionales es continuar con el sistema de reparto, pero incentivar en paralelo el desarrollo de seguros privados de retiro.
Endurecimiento de penas y mejoras en el sistema judicial
Además de las reformas económicas, la seguridad sigue siendo una de las principales preocupaciones del gobierno. La administración de Milei estudia cambios legislativos que incluyan un endurecimiento de las penas para ciertos delitos, especialmente aquellos relacionados con la reincidencia.
La reforma judicial también incluye la necesidad de cubrir vacantes en los juzgados y acelerar los tiempos de respuesta en los tribunales, con un enfoque en los juicios orales como mecanismo clave para lograr una mayor eficiencia en la justicia.
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