"Hay 11 millones de pensionistas que se ven positivamente afectados por la reforma, con la que además proporcionamos equidad intergeneracional a los jóvenes y robustecemos el sistema, en tres dimensiones: la suficiencia, la equidad y la sostenibilidad", ha anunciado Escrivá, en presencia de los secretarios generales de UGT, Pepe Álvarez, y CCOO, Unai Sordo, en el acto de firma del pacto en pensiones para las próximas dos décadas.
Las medidas, que se han aprobado este jueves el Consejo de Ministros, pivotan sobre el refuerzo de los ingresos de la Seguridad Social, con tres instrumentos: el alza de las bases máximas de cotización, la creación de una cuota de solidaridad para la parte del salario que ahora no cotiza por superar el tope máximo (será del 1% en 2025 e irá aumentando a un ritmo de 0,25 puntos por año hasta el 6% en 2045) y el aumento de cotizaciones sociales del MEI (Mecanismo de Equidad Intergeneracional), que subirá del actual 0,6% al 1,2% en 2029, a un ritmo de una décima extra cada año.
Otra de las novedades es el régimen dual del periodo de cálculo de la pensión para los próximos 20 años, mediante el cual los trabajadores que se jubilen podrán beneficiarse de la mejor de estas dos posibilidades: computar los 29 últimos años de carrera, descartando los 24 meses (2 años) peores, o que su pensión se calcule con el sistema actual, que tiene en cuenta los últimos 25 años cotizados. La Seguridad Social, de facto, calculará la pensión futura según los dos sistemas y aplicará el importe más favorable al trabajador. Esta nueva opción se irá introduciendo, de manera progresiva, desde 2027 a 2038, año en el que ya quedarán desplegados los 29 años (menos dos).
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